Aparece un Dodge Charger Daytona abandonado en una granja de Alabama
Publicado el 16/12/2015
No es extraño que en el mundo de los clásicos, aparezcan unidades abandonadas casi en cualquier lugar del globo, pero las granjas y caserones antiguos son los lugares predilectos para encontrarlos. Aquí un ejemplo más, con un Dodge Charger Daytona abandonado en una granja americana.
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Cuando me encuentro un suceso como éste, me pregunto cómo lo hacen para descubrir este tipo de cosas. Yo vivo en al sierra de Madrid, un lugar donde hay muchos prados, hay vaquerías, huertos y parcelas con almacenes y muchas casas antiguas y no me encuentro con estas cosas… ¿como lo hacen? ¡yo también quiero encontrarme un clásico abandonado! Me pasó algo parecido cuando visité el Museo del Automóvil de Salamanca, ¿cuántos coches se encontró el señor Gómez Planche en granjas y demás? ¡¡Quiero saber como lo hacen!! Otra cosa que no entiendo es como se puede permitir que un coche, sea cual sea, termine en ese estado, ¿dejadez? ¿falta de interés? ¿desinformación?
Todo esto viene a cuento por una nueva ‘pieza’ que acaba de parecer y que Mecum pondrá en subasta en enero de 2016. Se trata de un Dodge Charger Daytona, nada más y nada menos, abandonado en un viejo granero de una granja en Alabama, al sur de Estados Unidos. Su estado es absolutamente lamentable, tiene incluso hierbecilla en ciertas partes y musgo en el alerón trasero, pero aun así, es completamente recuperable. Para más inri, está completo y todo es original, pero el precio que esperan conseguir por él me parece un poco fuera de lugar: 150.000 dólares.
Evidentemente, si una casa de subastas como Mecum calcula esa tasación, es porque tiene un motivo y no es otro que la historia del modelo. El Dodge Charger Daytona, junto a su gemelo el Plymouth Superbird (que llegó después), fueron los culpables de la desaparición de los Muscle Car en los años 70, pero además, se trata de uno de los más brutales ‘coches músculo’ que se fabricaron, pues su existencia se debe únicamente a la homologación para la NASCAR, que exigía 500 unidades de calle. Se fabricaron 503 coches en total en 1969 y es uno de los Muscle Car más cotizados llegando a cifras de más de medio millón de dolares por unidades en perfecto estado.
Se vendieron dos versiones que se diferenciaban por mínimos detalles y por el apartado mecánico. El más brutal era el Dodge Charger Daytona 426 HEMI, con un motor V8 de 426 pulgadas cúbicas (unos 7 litros) con 425 caballos, cambio de cuatro marchas y una terminación más deportiva, no en vano, era el que se usaba en competición. La otra versión del Charger Daytona era el 440, que usaba un V8 de 440 pulgadas cúbicas (7,4 litros) con 375 CV y que además podía montar cambio automático de tres relaciones y otra serie de opciones. Este último es el que nos ocupa, un Dodge Charger Daytona 440 que cuenta con cambio automático de tres relaciones, asiento del conductor tipo ‘cubo’ y un cronómetro incorporado en el salpicadero, así como un diferencial trasero ‘heavy duty’ que se vendía como opción.
Lógicamente, será complicado que encuentre un coche de este estilo abandonado por España, pero con un Ford Capri me conformo, ¿tú no?