Desde hace bastante tiempo, el automóvil me tiene desencantado. No solo los coches, también la gran mayoría de los medios que puedes encontrar por Internet o impresos, es indiferente. Lo he comentado en otros sitios y lo comento ahora también aquí. Todos dicen las mismas cosas de forma parecida y sin apenas personalidad propia, exactamente igual que los electrónicos coches modernos, todos diciendo lo mismo, de manera parecida y sin apenas personalidad propia. Es muy, muy triste. Es algo que provoca que cada día que pasa, me atraigan más los clásicos, los coches 'viejos', los veteranos.
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Pero como en todo, siempre quedan pequeños reductos donde lo tradicional se mezcla con lo moderno de forma magistral, como es el caso de Morgan. Esta compañía lleva fabricando sus coches con las mismas técnicas desde hace más de 100 años, aunque también es cierto que han implementado nuevas tecnologías, sería una locura no hacerlo. Pero han sabido mantenerse fieles a sus orígenes y sus coches, son los casi los mismos desde hace décadas, el único modelo que lanzaron realmente nuevo tras casi 50 años de fabricación fue el Morgan Aero8, una de las mejores adaptaciones del diseño clásico que he podido ver. Y no solo de diseño, pues el Morgan Aero8 se fabricaba artesanalmente, usando a su vez otras técnicas modernas. Genial, sencillamente genial.
Aquel Aero8 se presentó en el Salón del Automóvil de Ginebra del año 2000, con un motor V8 de 286 CV y chasis de aluminio trabajado a mano. Recibió un nuevo V8 en el año 2004 con 300 CV y otros cuatro años después, en 2008, recibió otro V8 pero en esta ocasión capaz de entregar 367 CV. Todos ellos de origen BMW. Ahora, en 2015, llega la quinta generación del Morgan Aero8 con otro nuevo motor V8 y diversas mejoras, aunque no se aprecie a simple vista. Se ha elegido nuevamente el Salón del Automóvil de Ginebra para presentar un coche que sigue siendo lo máximo de Morgan, y eso, es decir mucho.
El Morgan Aero8 es de esos coches que impactan al verlos; capó largo, cabina retrasada, carrocería con muchas curvas y personalidad por doquier. No importa donde mires, todo desprende personalidad. Incluso los grupos ópticos, con los faros del Mini R53 y los pilotos del Lancia Thesis cuadran a la perfección en el diseño retrofuturista del Aero8. Hasta el volante de Lotus parece creado ex profeso. Comparado con sus hermano de gama, es un coche grande, imponente, y especial.
De cara a esta nueva generación, el Aero8 mantiene muchos elementos como el chasis, que se ha revisado en todos sus puntos para aumentar rigidez ya que el aumento de prestaciones del motor así lo requiere. Además, también se recupera el techo de lona, por lo que el nuevo Morgan Aero8 vuelve a presentar una carrocería descapotable, con un techo duro opcional que le otorga una línea contundente. Me gusta, me gusta mucho el Morgan Aero8. Estéticamente ofrece algunos retoques de poca importancia, pero cuando eres un fabricante como Morgan, no puedes permitirte estar cambiando las cosas solo porque hay que lanzar un nuevo modelo. Están obligados a retocar ciertas cosas para mejorar y perfilar, y para que no resulte más caro de lo que ya es, esos retoques se centran en temas técnicos como la nueva geometría de suspensiones, adaptar el nuevo diferencial autoblocante de BMW o calibrar las nuevas barras estabilizadoras.
Entrará en la línea de montaje a finales de año, montando un V8 de BMW con 4.799 centímetros cúbicos, dos turbos y 370 CV, que además de cumplir con la normativa de emisiones Euro6, lanza los 1.1280 kg del Aero8 hasta los 273 km/h.