La evolución, la adaptación a los tiempos y las modas no perdonan. Cosas que afectan a todo y a todos, incluido marcas como Land Rover, que tras ser adquirida por TATA, se encuentra en una de sus mejores épocas. Pero Land Rover nació hace muchísimo tiempo, allá por 1948, durante la posguerra británica, durante la escasez de acero. El primer Land Rover era un coche enfocado al trabajo, extremadamente sencillo pero ingenioso y además, fabricado con aluminio. Seguramente ni siquiera supierais que Bob Marley tuvo uno para moverse por las carreteras Jamaicanas, que por aquel entonces, no eran carreteras, sino caminos de cabras.
Mucho ha cambiado la firma; actualmente, el espíritu aventurero y auténticamente Land Rover pervive en el Defender, habiéndose diluido en el resto de hermanos de gama en pos del lujo y la imagen. Los Land Rover de nuestros días son coches pesados, llenos de cuero, madera y cachivaches electrónicos que pueden montar incluso motores V10 biturbo con 510 CV procedentes de Jaguar. Conservan muchas aptitudes off road, pero no son verdaderos todo terreno, sino SUV enfocados a clientes pudientes. Tal es así, que acaban de lanzar un modelo especial del tope de gama, el mítico Range Rover, para celebrar los 21 años de la edición Autobiography, la terminación más lujosa y exclusiva del Range Rover.
El Range Rover se lanzó al mercado en 1970, en respuesta a la alta demanda que dio comienzo en la década de los 60 y que reclamaba coches 4x4 cómodos, pero con aptitudes camperas. Se forjó un nombre en competiciones como el Paris-Dakar y ha llegado hasta nuestro días en sucesivas evoluciones que han trastocado su concepto. No me imagino un Range Rover actual en el Paris-Dakar, pero si me lo imagino como un Autobiography. Esta edición se presentó en 1993, en el Salón del Automóvil de Londres, llegando al mercado al año siguiente. Según la propia Land Rover, ejemplificaba la combinación del diseño y el lujo de los Range Rover, adaptándose a los gustos y preferencias de sus propietarios. Si os fijáis, no hay mención al comportamiento fuera de carretera...
Tampoco quiero equivocarme criticando algo que no hace falta criticar, por eso Land Rover diversificó la gama con varios modelos, cada uno con su personalidad y características y le dejó al Range Rover la tarea de la representación, con la edición Atuobiography como la más especial y exclusiva. Tan exclusiva, que las primeras unidades se crearon según los deseos específicos de cada cliente, hasta el más mínimo detalle. El éxito fue inmediato y la demanda, desbordante. Por ello, se creo una edición limitada utilizando el Range Rover de batalla larga con el motor más grande de la gama. Solo se hicieron 25 unidades, pero fue la base de lo que vino después, pues todas las generaciones a partir de entonces han tenido su Autobiography.
Land Rover siempre quiso que los Range Rover Autobiography estuvieran a la vanguardia de la innovación y las primeras unidades, se destacaban por tener la posibilidad de montar una máquina de fax en los asientos traseros, algo que en nuestro días, siempre conectados al mundo digital mediante Internet parece vetusto y del paleolítico, pero situaros en la época y pensar lo que significaba tener fax en el coche. Prácticamente lo mismo que montar el navegador, la televisión o el lector de DVD que llegaron posteriormente y según iba evolucionando el modelo.
